Después del coqueteo, logras conquistar al hombre ideal: Guapo, bien sucedido, adulto, equilibrado, todo lo que siempre has deseado. Pero había un detalle que descubres después: el paquete viene “completo”. Sí, mi preciosa amiga… Esto puede realmente parecer un problema sério. ¿Pero necesita serlo? O existen buenas opciones para lidiar con eso y, hasta mismo ¿Ventajas en esa relación?
Un relacionamiento con un novio con hijos puede ser un desafío, pero en realidad, los problemas suelen ser más contigo misma: Celos, competitividad, intolerancia, dependencia emocional, carencia… Pueden ser algunas de las razones por las cuales tú no logras enfrentar esta situación. Compreender por qué un novio con hijos es un problema puede desvelar mucho sobre ti misma. Embarcar en una relación así puede ser, inclusive, un buen viaje para el autoconocimiento.
El principal problema que enfrentamos al tener que lidiar con esa situación son los celos. Cuando estamos con alguien queremos sentirnos la persona más importante del mundo para aquella persona, ¿Cierto? Pero cuando se tiene un novio con hijos, éstos estarán en primer lugar. Lo que es natural, al final, si no es así, ¿Realmente quieres estar con ese hombre? Es algo que pensar, ¿No es así, preciosa?
Segundo, debemos lidiar con el hecho de que el tiempo libre suyo no es exclusivamente nuestro. Dividir al novio con alguien, mismo que ese alguien sea un hijo o hija, puede ser complicado y un limitador un tanto inconveniente. Al final, los planes necesitan pasar siempre por la posibilidad de llevar a los niños junto, encontrar espacio en la agenda ya apretada, etc.
Y tercero, un novio con hijos significa un novio con una ex que irá, necesariamente, formar parte de la vida de él, y por lo tanto, de la tuya también y sabemos que puede ser desastroso tener cualquier relación con la ex, ¿Cierto? ¿O quizá no?
Podríamos aquí hablar sobre otros tantos problemas… Pero la intención aquí no es terminar con tu novio con hijos, amiga, y sí, a aprender a cómo lidiar con un hombre con hijos y hacer que la relación funcione. Entonces, vamos allá, preciosa… Hora de pensar en como resolver esto y aprender a convivir en harmonía.
Todo el mundo tiene pasado
Amiga, vamos a ser sinceras: si tú quieres un hombre en tu vida, debes lidiar con su pasado emocional y él con el tuyo.
A lo largo de la vida, acumulamos una serie de experiencias, relacionamientos pasados, traumas, exigencias y también personas que forman parte de nuestras vidas.
En el momento de entrar en un nuevo relacionamiento, necesitamos tener la noción de que, así como nosotras, él también habrá acumulado todo esto. Y una de estas cosas puede ser que él tenga hijos.
La primera cuestión es: ¿Estás dispuesta a lidiar con su pasado? Es necesario ser muy sincera en este punto. No estamos hablando de que ya estés lista para eso ya de cara, pero si él vale el esfuerzo de buscar los medios para enfrentar esa situación. Nadie nace preparada para un relacionamiento así y va ser necesario tu buena voluntad y paciencia para desbravar este camino.
La segunda cuestión es: ¿Estás dispuesta a lidiar con tu propio pasado emocional? Ningún relacionamiento es fácil, pero envolverse con los hijos del novio puede despertar problemas serios del pasado y cuestiones importantes del futuro.
Por lo tanto, es necesario ejercitar la comprensión, empatía, consideración, enfin… Alcanzar una alta inteligencia emocional para saber avaliar las mejores estrategias de convivencia y conseguir aproximarse con naturalidad.
Entonces, si tú estás dispuesta, vamos allá a desvelar lo que se necesita hacer para conseguir que esta relación funcione de la mejor manera posible.
Dale tiempo a tu novio
Entrar en un relacionamiento no es fácil para nadie, amiga. El proceso de complicidad y apertura lleva un tiempo, se sabe. Y cuando él tiene hijos, entonces, es muy probable que sea cauteloso al presentarte y permitir tu convivencia con ellos.
Eso puede parecer un problema, como si él no confiara en ti. Pero, en realidad, el hecho de que él adopte esa preocupación demuestra que es un padre que vela por sus hijos. Y eso es un atributo muy positivo, ¿No crees?
Entiende su parte: él no quiere forzar una aproximación sin tener la seguridad de la buena receptividad de ambas partes. Es importante tener la convicción de si los hijos aceptan bien el hecho de que el padre esté en un relacionamiento y que la pareja – eso mismo, tú, preciosa – esté receptiva con el hecho de que él tenga hijos.
Dále un tiempo a tu novio para que él pueda manejar la situación. Presionar para ser presentada a los hijos puede ser un tiro en el pie de la relación. Actúa con naturalidad, deja que el asunto fluya sin presión y déjalo sentirse a gusto para dividir ese aspecto de su vida contigo.
Date tiempo a ti misma
Tan importante cuando darle tiempo al novio es darte tiempo a ti misma para procesar y entender la situación. Tú no eres obligada a lidiar con los hijos de él sin estar preparada. Ten una conversación clara y abierta sobre eso, dile que ya te sientes a gusto o no, cuáles son tus preocupaciones y el tiempo que necesitas para poder sentirte bien en relación a sus hijos.
No te presiones para ello. Y no dejes que él te presione. Una aproximación sin preparo emocional puede ser desastrosa y abalar seriamente el relacionamiento. Ten la seguridad de que si tú te sientes bien con ello y estás dispuesta a conocer a los hijos de tu novio. Tu tiempo es tan importante como el de él, y solo cuando todos estén preparados es que ese encuentro debe ocurrir.
No des demasiado tiempo
Tampoco hay que exagerar, ¿No es así, preciosa? Si él trata de evitar que te encuentres con sus hijos, con excusas o mismo activamente diciendo que no es el momento, puede que exista un problema ahí.
¿Por qué él evita con tanto empeño? En ese momento, lo mejor es analizar si tú estás transmitiendo las señales correctas de que ya te sientes a gusto con la situación o hasta mismo tener una conversación seria sobre el asunto para entender los motivos.
Si, por otro lado, eres tú quien está evitando y excusando para evitar ese encuentro, es hora de mirar en ti misma y entender cuál es el problema. Si él quiere presentarte a sus hijos, es porque él confía en ti y te quiere en su vida de verdad. Prepárate, pero no luches contra eso. Es un ciclo natural cuando se tiene un novio con hijos.
Nunca demuestres celos de los hijos
Sentir celos es natural. Todas nosotras lo sentimos, en mayor o menor grado, ¿Cierto amiga? Pues sí, pero es importante entender y lidiar con ese sentimiento, especialmente en relación con los hijos de tu novio.
Ten en mente que tú no debes competir con sus hijos. Hasta porque, si tú entras en esa competición, perderás. Al final, los hijos son y deben ser la prioridad y siempre formarán parte de la vida de él, pero tú todavía estás iniciando ese camino.
Si sentir celos es inevitable, no los demuestres. Trabaja tu interior para entender que tu posición no está comprometida por la existencia de hijos. Ocupáis espacios diferentes en la vida de tu novio y es posible convivir en harmonía. Trata de entender la relación padre-hijo de él y observa en eso algo bueno. Con el tiempo, te darás cuenta de que esos celos son un sentimiento sin fundamento y dejará naturalmente de existir.
Nunca faltes con la madre de los hijos
En buena parte de los casos, un novio con hijos es un novio con ex presente. La madre de los hijos también formará parte de su vida, y es importante también que aprendas a lidiar con ella.
Independientemente de la relación de tu novio con su ex, es necesario siempre mantener el respeto. Tanto para no parecer la actual loca implicante, como para no entrar en discusiones desnecesarias que podrán tumultuar vuestro relacionamiento. Por eso, siempre respeta a su ex, especialmente en frente a sus hijos. Madre es sagrada y no debes entrar en esos trapos.
Si la relación de ellos es buena, es importante que la tuya también lo sea. Trata de tener un relacionamiento cordial y educado con ella. No es necesario tener celos, rabia o demostrar agresividad. Al final, preciosa, él está saliendo contigo.
Si, por otro lado, la relación de ellos es mala, mantén la distancia de ese asunto y de ella. No des oportunidades para ser atacada o, peor, tener conflictos. Nunca hables mal de la madre de los hijos y, mismo que te enteres que ella habla mal de ti, encaralo con superioridad. Lidiar con esas adversidades, infelizmente, puede formar parte del “paquete”.
No intentes ser su madre
Pasado el punto de la aproximación con los hijos, necesitamos hablar sobre cómo trabajar tu relacionamiento con ellos. El primer paso es entender tu lugar. Tú no eres su madre y ni debes tratar de ocupar esa posición. Ellos ya tienen una madre y tu sitio es como novia de su padre y, con el desarrollo de la relación, quien sabe de madrastra.
La educación de los hijos es competencia del padre y la madre. Y tu novio debe escuchar tus opiniones, está claro. Y es tu derecho tener una conversación franca sobre lo que pienses. Pero la palabra final es de él y tú debes respetarla siempre.
Lo ideal es que tengas una buena relación con los hijos de tu novio. Algunos consejos, buenas conversaciones, momentos agradables, compañía. Pero cuando se trate de educar, debes dejar esa tarea para el padre y la madre.
Sé compañera
Estar en un relacionamiento es iniciar una unión, un equipo. Estáis juntos para tener una vida, dividir buenos y malos momentos, crear buenos recuerdos y construir una familia. Pero los hijos de él también formarán parte de esa familia, y cabe a ti entender y aceptar eso.
Ser compañera es estar presente, atenta y trabajar junto a él los problemas que puedan surgir, inclusive en el desarrollo de sus hijos. Incluso que no sea tu papel, el de ser madre, es tu papel ser consejera y apoyadora.
Colocarse en contra de los hijos, evitar el asunto o ignorar los problemas como si no fueran tuyos demuestra falta de compañerismo – algo que ninguna relación soporta.
Jamás menciona los hijos en discusiones o problemas
Los problemas de la pareja son de la pareja. Es inevitable, en cualquier relacionamiento, que existan peleas o discusiones, hayan problemas y percances. Superarlos es lo que torna la relación más fuerte.
Usar a los hijos del novio como argumento en una discusión demuestra tu inseguridad e incapacidad de lidiar con la situación. Decir que soportas a sus hijos y por eso él necesita hacer algo o soportar algo, por ejemplo, es una excelente manera de sabotear la relación.
Por eso debes controlarte en las discusiones. Que él tenga hijos o no, es un problema que no debe ser mencionado como si lo fuera. Ayuda en lo que te sea posible.
Mismo que no seas la madre de los niños, tú puedes ayudar. En realidad, ofrecerse para cosas simples, como recoger en el colegio, llevar a una consulta, salir para tomar un helado, puede ser una excelente forma de aproximarse de los hijos y estrechar los lazos de tu relacionamiento.
Trata de hacer eso con naturalidad y sin prisas. Empieza pequeño, acompañando las actividades de él con sus hijos, y hasta que todos se sientan a gusto y confiantes lo suficiente para que tú puedas hacer ello sola. Participar de la vida del novio con hijos es participar de la vida de los hijos.
No tengas miedo de decir las cosas
Amiga, si notas algo de malo o que no estás de acuerdo, no debes tener miedo a decir lo que piensas. Incluso porque puede ser un problema que venga a tona en el futuro si se silencia. Por eso, habla con tu novio para descubrir cómo lidiar con situaciones problemáticas que surjan en la convivencia con sus hijos.
Entiende el tiempo particular de él con sus hijos
Mismo que seas parte de su vida, es posible y probable que él necesite y pida por tiempo a solas con sus hijos. Eso no debe ser motivo de celos ni discusiones, como ya hemos hablado. Es importante que él construya y tenga esos lazos. Dale tu apoyo y permite ese espacio con el corazón abierto.
No debes sentirte, en esas horas, preterida de cualquier manera. Es apenas una necesidad de él en fortalecer el relacionamiento con sus hijos, lo que demuestra preocupación con la familia y la unión.
Habla sobre tener hijos
Uno de los puntos cruciales cuando se tiene un novio con hijos es: ¿Cómo será si tu quieres tener hijos?
Entramos en un relacionamiento con la expectativa de que sea largo y sólido, para construir una vida en conjunto. Solo que muchos hombres que ya tienen hijos de relacionamientos pasados, no desean tener más niños. Eso puede ser un problema si ser madre es uno de tus planes.
Si tú quieres ser madre, esto es un asunto que necesita ser hablado, en seguida que el relacionamiento se torne más serio. Y posiblemente, tendrás que hacer una elección entre estar con él o seguir adelante.
Es verdad que muchos cambian de idea después de un tiempo. Pero, si él fuera irreductible en relación a eso, mejor no apostar en lograr hacer su cabeza en un futuro.
Tener que lidiar con un novio con hijos no es nada fácil, es verdad. Pero con estos consejos, no parece tan difícil, ¿No te parece, amiga? ¿Tienes más dudas? ¿O quieres dejar algún consejo para otras mujeres magnéticas en esa situación?
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Vanessa de Oliveira